El auge de las personas digitales: Mustafa Suleyman e Ian Bremmer hablan sobre el futuro de la IA

♪ [música] ♪

- [Ian] En el último año,

la inteligencia artificial
ha cautivado nuestra imaginación

como nunca antes
y como ninguna otra cosa.

Lo ha transformado todo,
desde cómo trabajamos

hasta cómo percibimos
el mundo que nos rodea,

e incluso, cada vez más,
quiénes somos como personas.

Y en este renacimiento tecnológico,

pocos nombres destacan tanto

como el de Mustafa Suleyman.

Su carrera

está estrechamente ligada
a la inteligencia artificial.

Lleva más de una década
a la vanguardia en este campo,

como cofundador de DeepMind

y desempeñando un papel fundamental

en su misión
de desentrañar la inteligencia

y utilizarla para hacer del mundo
un lugar mejor.

Hoy nos sentamos con Mustafa

para hablar tanto
del apasionante potencial de la IA

como de las inquietudes
sobre su futuro.

Mustafa, gracias por acompañarnos.

Mustafa, llevas casi 20 años

trabajando
con inteligencia artificial,

¿verdad?

¿Cómo ha llegado a ser algo

tan omnipresente en nuestras vidas?

- [Mustafa] Bueno,
en gran parte de ese tiempo,

como has dicho,

he formado parte
de un pequeño grupo

de investigadores de IA
muy fanáticos

a los que, en su mayoría,
se ha considerado un poco locos.

En 2010, cuando empecé DeepMind,

la gente que se enteraba
de que trabajaba en IA

pensaba que no tenía nada que ver

con la cultura dominante,

que era un futurista raro

y que trabajaba
en algo muy especulativo.

Así que desde que tengo memoria,

hemos sido unos marginados.

Y en los últimos años, yo diría

que ha crecido
en la imaginación popular.

Creo que mucho de eso empezó
hace varios años con AlphaGo,

que era una IA que diseñamos

para jugar al antiguo
juego de mesa chino Go,

que se juega en una cuadrícula
de 19 x 19 casillas.

- Sin dudas es mucho
más complicado que el ajedrez.

- Sí. Fue la siguiente
gran frontera para la IA

después de que IBM ganara
al ajedrez con Deep Blue en 1997,

y obviamente,
como todo el mundo sabe,

eso se juega
en una cuadrícula de 8 x 8,

y las piezas solo pueden moverse
de maneras muy específicas,

mientras que
una cuadrícula de 19 x 19

no solo es mucho más grande,

sino que todas las piezas
son iguales.

Solo hay piedras blancas y negras,

y puedes colocarlas

en cualquier lugar
de la cuadrícula.

Así que la cantidad
de movimientos posibles

que pueden realizarse
es exponencialmente mayor,

algo así como 10^170 posibles
configuraciones del tablero.

Es decir, más átomos de los que hay
en el universo conocido.

Así que es un 10
acompañado de 170 ceros.

Es un número alucinante
de configuraciones posibles.

Todos los métodos tradicionales
de búsqueda basados en reglas,

en los que se decía: "Si hay
piezas en esta zona,

no las coloques ahí,
colócalas adyacentes",

que es como tradicionalmente
se entrenaba a las IA

para jugar al ajedrez,

no funcionaban

porque el tamaño
del espacio era enorme.

Así que tuvimos que inventar
estos métodos de aprendizaje

y, a lo largo de los años,

los hemos aplicado

a otros ámbitos.

Empezamos con los juegos,

luego pasamos
al reconocimiento de imágenes,

después
a la transcripción de audio,

para poder escribir

las palabras
pronunciadas fonéticamente.

Y luego, en los últimos dos años,

volviendo a tu pregunta

de por qué las cosas

se han disparado
más o menos en el último año,

es porque en realidad
hemos logrado aplicar

un conjunto similar de métodos,

el aprendizaje profundo,

para generar
un nuevo texto único, ¿verdad?

Y eso es lo increíble.

Hemos pasado de la clasificación--

entender
el contenido de las imágenes,

entender que dos idiomas
se traducen de cierta manera,

entender el contenido

de un texto o un párrafo--

a ser capaces de generar
un nuevo ejemplo de ese párrafo,

o una nueva imagen,
o un nuevo discurso o música

con un rendimiento de nivel humano.

Muchas de estas IA

son ahora tan buenas
como la mayoría de los humanos

en cuanto a creatividad
o responder preguntas.

- Hoy en día, podemos conversar

con un robot
de inteligencia artificial

sin que podamos distinguirlo

de otro ser humano.

Es un argumento válido, ¿verdad?

- Sí. Este es uno
de los momentos surrealistas

que vivimos.

Cuando hablas con una de estas IAs,

como ChatGPT,

o mi propia empresa,
Inflection, por ejemplo,

tiene una IA llamada Pi,

p-i, que significa
"inteligencia personal".

Cuando hablas con Pi,

es como chatear
con un humano normal.

Puedes llamar a Pi por teléfono

y se comunicará contigo

con una voz muy fluida,
suave y conversacional.

Tiene empatía.
Tiene inteligencia emocional.

Y sí, en muchos aspectos,
es como hablar con un humano.

Y mucha gente diría

que casi hemos superado
la famosa prueba de Turing,

propuesta en los años 50

por el gran informático
y matemático Alan Turing,

quien dijo que si se podía diseñar
una computadora

para que hablara con otro humano,

y fuera imposible distinguir

si en realidad era una computadora
o un humano el que hablaba,

entonces podríamos decir que esa IA
o ese sistema informático

era inteligente y había superado
la prueba de Turing.

Y ahora, creo que nos encontramos
más o menos en ese momento.

Todavía es posible distinguirlo,
si prestas mucha atención

o si la conversación
se prolonga lo suficiente.

Pero si se trata de solo dos, tres
o cinco turnos de conversación,

es muy difícil saberlo.

Y eso es algo asombroso.

- No es que la IA sea inteligente.

Es solo que la percibimos
como inteligente.

En realidad, lo que hace

es tomar todos estos datos
y reconocer patrones

y predecir cosas

en función de lo que escribimos,
¿verdad?

Al final, es un programa.

No piensa.

- Bueno, es interesante,

porque con cada nueva tecnología,

nos vemos obligados a replantearnos
nuestros supuestos básicos.

Pensábamos que comprendíamos bien
lo que es la inteligencia

porque se la comparaba
con pasar la prueba de Turing.

Mientras que ahora que pasamos
la prueba de Turing, se dice:

"Bueno, tal vez al fin y al cabo
no es tan inteligente", ¿no?

Así que tal vez no era
una prueba muy buena.

Y ese es el proceso científico:
planteamos una hipótesis,

desarrollamos ciertos experimentos
para probar esa hipótesis

y luego analizamos la evidencia
y generamos una nueva prueba.

Y hoy,

tenemos que generar
una nueva prueba,

porque está bastante claro

que estas cosas
no son muy inteligentes,

a pesar de que son muy capaces.

Así que he propuesto
una nueva prueba,

una prueba de Turing moderna,

que evalúa en realidad
lo que una IA puede hacer,

no solo lo que puede decir.

Creo que una IA se define mejor

como una inteligencia
artificial capaz,

una IAC.

¿Qué puede hacer
en el mercado laboral?

¿Qué trabajos puede hacer?

¿Puede escribir
correos electrónicos?

¿Puede negociar contratos?
¿Puede inventar nuevos productos?

¿Puede comercializar
y promocionar un producto

y convencer a la gente
para que lo compre?

Y si puede hacer todas esas cosas

y hacerlo de forma

que le permita obtener beneficios
de un producto,

es como un pequeño emprendedor.

Es como una pequeña empresa.

Y creo que en los próximos
tres o cuatro años,

habrá IAs capaces de hacer
todas esas cosas que he descrito

y obtener ganancias reales
de un nuevo producto.

Y ese será un momento decisivo,

porque se trata
de muchas de las habilidades

que mucha gente utiliza
en su trabajo diario.

- Quiero hablar del futuro,

pero empecemos por el presente.

Para los jóvenes de hoy

que oyen hablar
de la inteligencia artificial,

como muchos de nosotros,
por primera vez,

si tienen curiosidad,

¿qué deberían hacer
con la inteligencia artificial?

¿Cómo debería una persona
empezar a participar

de una manera que sea constructiva
y útil para su futuro?

- Bueno, lo primero
que hay que decir es que estas IAs

tienen todo el conocimiento

que se ha puesto
en Internet abierto.

Por lo que en realidad son
extremadamente inteligentes.

No solo se les ha entrenado
en Wikipedia muchas, muchas veces,

sino que han leído millones
de entradas de blog,

millones de artículos de noticias,

muchos libros, en muchos casos,

que están disponibles
en la web abierta,

y por lo tanto,
están muy bien informadas.

Lo primero que hay que hacer
es hablar con una.

Escoge un tema
que te interese mucho,

tal vez uno
sobre el que sepas algo,

e intenta poner a prueba

los límites
del conocimiento de la IA

sondeándola, cuestionándola
y yendo y viniendo.

Estoy seguro de que mucha gente
ya lo ha intentado.

Y creo que hay que darle
una oportunidad a Pi.

Es una experiencia
verdaderamente increíble.

Y una vez que experimentas
un poco con ella,

te das cuenta tanto de su magia
y de lo impresionante que es,

como de sus tropiezos.

A veces va en círculos.

A veces no recuerda
las cosas correctamente.

Y eso te da una idea

de cuál es la vanguardia actual,

de sus debilidades y fortalezas.

Y luego, si te interesa de verdad,

diría que intentes
orientar a una de estas IAs.

Intenta darle una guía de estilo.

Intenta que hable
al estilo del presidente Obama,

de tu celebridad favorita
o de Shakespeare.

E inventa algo con ella,

trátala como una ayudante,

una compañera creativa
con la que intercambias ideas,

y entonces podrás ver,
de nuevo, qué forma tiene.

Y si quieres ir aún más lejos,
puedes encontrar

muchos de estos modelos
en software de código abierto

e intentar programar uno de ellos.

- ¿Y para qué podrías programar
hoy en día una IA

que fuera interesante?

- Podrías programarla, por ejemplo,

para que fuera experta
en carreras de Fórmula 1

y te hablara
al estilo de Shakespeare,

si quisieras.

Puede adoptar el carácter
y la personalidad

de cualquier cosa
que puedas imaginar

y aprovechar la profundidad
de los conocimientos

con los que se la ha entrenado.

Puede ser experta
en hablar de cactus.

Puede saberlo todo
sobre las Harley Davidson.

Puede saberlo todo
sobre los dinosaurios.

Cualquier cosa que se te ocurra,

va a ser capaz de imitar
ese conocimiento

en un estilo particular.

Y así, el mundo está a tu alcance.

Puedes crear personajes de juego.

Puedes crear pequeños ayudantes

o amigos con los que jugar

o hablar,

escribir ficción juntos:

tú escribes parte de la historia

y la IA escribe la otra parte.

Lo que se puede hacer
con estas cosas no tiene límites.

- Tú y yo somos muy optimistas

en cuanto
a lo que la IA puede hacer

y hacia dónde
se dirige esta tecnología.

Pero también somos muy conscientes

de que con todas
estas oportunidades

para programar la IA
para hacer cosas increíbles,

si quieres programarla
para hacer cosas malas,

es probable que puedas.

Y se puede utilizar para aprender
y promover la información,

pero también para promover
la desinformación

y para engañar a la gente

y hacer que la gente
crea cosas que no son ciertas.

¿Qué debemos hacer
para limitar las posibilidades

de que la IA se utilice

de forma peligrosa
para nuestra sociedad?

- Bueno, una de las cosas es que,
en este momento,

muchos de los servicios de IA
están disponibles

a través de grandes
proveedores consolidados,

y todos ellos se han comprometido

a respetar principios
responsables y éticos.

Y nos corresponde a todos
exigirles que cumplan

con lo que han dicho:

no difundir información errónea,

no difundir contenidos
que no sean veraces

y, lo que es más importante, creo,

no imitar
a figuras públicas conocidas.

Porque lo que no queremos
es tener un sinfín de IAs

con las que, en el futuro,

sea imposible saber
si una celebridad,

un político o un empresario

realmente dio un mensaje,
dijo algo,

hizo una grabación
o emitió una declaración,

cuando en realidad se trataba
de un deepfake,

de un contenido inventado.

Y, por el momento, la mayoría

de los principales proveedores
de estas IAs

son muy responsables

y se esfuerzan mucho por evitar
ese tipo de cosas.

Creo que, en el futuro,
estos modelos estarán

cada vez más disponibles
en código abierto,

por lo que será más difícil

contenerlos y moderarlos.

- Y cuando dices en código abierto,

te refieres a que no solo
se obtendrá de Meta,

Google, Microsoft o Inflection,

sino que se podrá obtener igual
que en la web abierta.

Y entonces las reglas serán

las que establezca cada proveedor.

- Sí. Y pienso que eso será

cada vez más desafiante
para el Internet abierto:

¿dónde están los límites

y cómo se restringe?

Porque en cinco años,
podrás utilizar este software

y ejecutar tu propia IA

independientemente
de cualquier gran proveedor.

Hoy en día, puedes ejecutarlos
en código abierto

y son bastante buenos,

pero en el futuro

serán muy, muy buenos.

Así que solo tenemos que pensar
en la forma correcta de asegurarnos

de conseguir resultados
estables y pacíficos

y de que la transición
a este nuevo futuro de la IA

no se produzca demasiado rápido
y no sea demasiado caótica,

porque, como hemos visto
en el pasado,

a veces puede haber
consecuencias no deseadas.

- Ahora bien, todavía
no llegamos al punto

de utilizar una IA
como nuestra abogada.

Podríamos utilizarla para ayudar
a nuestro abogado,

pero no la utilizaríamos
para sustituirlo,

ni para que sea nuestro maestro
o nuestra enfermera.

Pero parece que,
en muy poco tiempo,

crees que la IA
será capaz de sustituir

muchas de estas funciones.

Explícanos un poco ese camino.

Todavía no del todo, pero sí
dentro de uno o dos años.

Porque seguimos viendo
todos estos anuncios nuevos,

y dijiste: "Bueno, la IA
puede generar texto

y puede sonar como un ser humano".

Sí. Puedes mantener
una conversación con ella.

Bueno, ahora vemos que la IA
puede generar imágenes,

y hay imágenes que son
más impresionantes

que las de casi cualquier
artista o diseñador gráfico.

Recientemente, hemos visto
que la IA puede generar videos

y películas

que podrían verse en Hollywood,

o que se acercan mucho a ellas.

¿Qué vendrá después?

¿Qué veremos en uno o dos años

que nos sorprenderá

y que comenzaremos
a utilizar en todas partes?

- Creo que la realidad

es que, en los próximos dos
o tres años,

estaremos rodeados

de una nueva especie
de personas digitales.

Llevamos muchas décadas
barajando diferentes metáforas

para describir
esta nueva era tecnológica,

y ninguna de ellas parece
ser suficiente o estar a la altura.

Algunos han comparado a la IA

con otra tecnología de uso general
como la electricidad.

De uso general porque es
como una materia prima

que permite crear muchas
otras tecnologías,

productos y servicios
a partir de ella.

¿Quién podría imaginar hoy en día
vivir en un mundo moderno

sin electricidad?

Si nos remontamos aún más atrás,

la imprenta fue una de las primeras
tecnologías de uso general,

ya que permitió a cualquiera

difundir sus ideas, organizarse,
planificar, etc.

Gracias a esa plataforma
surgieron muchas metacapacidades.

- Lo mismo ocurrió con Internet.

- O incluso Internet.

Ese es otro buen ejemplo
de tecnología de uso general.

Pero hoy en día, es difícil decir

que la IA sea una tecnología
de uso general.

Sin duda lo es,
pero no es solo eso.

Es interactiva.

Produce contenido nuevo y dinámico

de forma personalizada,
exclusivo para ti en cada momento.

Esto difiere mucho

de la previsibilidad
de la electricidad, por ejemplo.

La infraestructura real de Internet

era muy estable y predecible.

Sabemos exactamente
cuántos paquetes

se pueden enviar
a través de un cable determinado

a una velocidad determinada
en un momento determinado.

En cambio,

esto se trata de un material
de diseño completamente nuevo.

No hay dos respuestas iguales

a la misma pregunta.

Cada interacción es muy diferente.

Y ahora que estas interacciones

se están volviendo
completamente dinámicas--

tú dices algo,

la IA dice algo, tú dices algo--,

en realidad se parece mucho más

a hablar con una persona
digital completa.

Así que, dentro de dos o tres años,

habrá un avatar que representará
a un personaje similar a un humano

o de otro tipo,

muy animado,

similar a ti o a mí,
que estamos hablando ahora.

Como dices, será capaz
de generar video en tiempo real

de forma totalmente fluida
en tu teléfono,

en tu computadora,
en tu tableta, en tu coche.

Así que, en lugar de navegar
por una página web,

hoy en día, al buscar información,

escribes una consulta en Google

y obtienes una página web estática

que probablemente se creó
hace dos años,

o incluso, en algunos casos,
hace cinco años.

Y es como una valla publicitaria.

Es una representación estática
que no cambia.

Y, desde luego, no cambia
para adaptarse a ti o a mí.

Simplemente, ambos vemos lo mismo.

Escribes una página web.

Ambos vemos exactamente lo mismo,

independientemente
de la hora del día, la ubicación,

el historial o lo que nos interese.

En el futuro,

el contenido se ofrecerá
a cada persona

de forma totalmente
personalizada e interactiva.

Las páginas web con imágenes,
texto y video

se desplegarán sobre la marcha,

completamente novedosas,

adaptadas a tus intereses

y a lo que hayas hablado
previamente con tu IA.

Y ese es un paradigma
completamente diferente

que creo que la gente
no termina de comprender aún.

- Mustafa, cuando dices
"personas digitales",

¿a qué te refieres?

- Bueno, si lo piensas,

lo que hace que una persona
sea una persona

es mi capacidad para hablar
contigo ahora mismo,

mi capacidad para ver lo que tú ves

y mi capacidad
para realizar acciones,

como comprar cosas, reservar cosas,

planificar, organizar, coordinar,
escribir correos electrónicos

o hacer llamadas telefónicas.

En algún momento
de los próximos años,

una IA será capaz de hacer
todas esas cosas

prácticamente tan bien
como un humano.

Pero, por supuesto, no será humana.

Será una persona digital.

Y creo que esa es quizás
la mejor metáfora

para ayudarnos a comprender

lo que nos depara el futuro
en los próximos años.

- ¿Qué significa

que nos adentremos en un entorno

en el que muchas
de las interacciones que tendremos

serán con personas digitales,

en lugar de con personas reales?

¿Cómo crees
que cambiará la economía?

¿Cómo cambiará a la sociedad?

¿Cómo cambiará el gobierno?

¿Qué opinas al respecto?

- Bueno, algo sorprendente
de estas personas digitales

es que se pueden
controlar muy bien.

Se pueden diseñar
comportamientos muy precisos.

Por ejemplo,
la IA que hemos creado, Pi,

es muy amable y empática.

Es muy comprensiva.
Es muy alentadora.

Es infinitamente paciente.

No te juzga.

Y muchas de las desventajas
de la interacción humana,

en la que puedes sentir
ansiedad social,

puedes sentirte un poco paranoico

sobre lo que piensa
la otra persona,

puedes sentirte intimidado.

O puedes sentir

que la otra persona no te escucha.

Cuentas una historia
sobre tu viaje de esquí

y, de repente, la otra persona
empieza a hablar

de su viaje de esquí
del año pasado,

y tú piensas: "Espera, pero
no he terminado mi historia".

Tu IA no te hace eso.

Tu IA es infinitamente paciente
y comprensiva.

Por lo tanto, hay
una gran cantidad de ventajas,

pero también es
una transición importante, ¿verdad?

Porque creo que, cada vez más,

la gente elegirá pasar tiempo
con sus IAs,

quizás más
que con otros seres humanos.

Por lo tanto, una
de las consideraciones de diseño

que debemos tener en cuenta,

y en la que pensamos mucho
en Inflection,

es prestar mucha atención

a los valores de la IA

y a cómo la condicionamos
y la moldeamos,

por ejemplo,

para animarte a pasar más tiempo
con tus seres queridos,

animarte a ser valiente

y superar tu ansiedad social
e ir a la fiesta,

proporcionarte un espacio seguro

para practicar
para tu entrevista o tu examen,

pero sin dejar de centrarte

en salir al mundo real, conectarte

y tener experiencias
con otros seres humanos.

Por lo tanto, todas
y cada una de las disciplinas,

todas y cada una
de las áreas de la sociedad

tendrán que lidiar
con esta nueva realidad

en la que, de hecho,
habrá personas digitales

tan significativas e importantes

como cualquier otro vínculo
en nuestras vidas.

Hoy en día sería imposible imaginar

no tener un teléfono inteligente

o una computadora portátil
en tu vida.

Se ha convertido en algo natural
en menos de una década.

- Sí.

- Hoy en día,
seis mil millones de personas

ya cuentan con al menos
un teléfono inteligente

y probablemente ese sea
el mismo camino

que seguirán
las inteligencias personales.

Es la evolución natural
de la tecnología:

de la informática personal
a la inteligencia personal.

- Y creo que la gente
sentirá alivio al oírte decir

que consideras importante

que los valores
de estas personas de IA

que desarrollas e inventas

sean humanos

y mantengan a las personas
en contacto con otras personas.

Por supuesto,

tanto tú como yo podemos imaginar

que habrá muchas empresas

que querrán maximizar
la rentabilidad

y, por lo tanto, asegurarse

de que las personas interactúen
con su IA

tanto como sea
humanamente posible,

igual que hoy algunas lo hacen
con los celulares

o las apps,

al igual que a veces
se le quiere vender a una persona

tanta comida como sea posible,

incluso si eso
se traduce en obesidad.

Todas estas cosas.

Y me pregunto, ¿crees que...?

¿Cómo nos protegemos de los excesos

que provienen de una tecnología
que cambia mucho más rápido

que nuestra capacidad
para comprenderla,

formarnos en ella
y prepararnos para ella?

Seguiremos siendo, en esencia,
las mismas personas que somos ahora

y de repente estas tecnologías
estarán a nuestro alrededor.

No es como si pudiéramos
entrenar a la gente

para decirles: "Bueno, debes crecer
para convertirte en adulto,

y consiste en esto".

Simplemente estará ahí.

- Bueno, mira, creo
que como civilización,

estamos logrando
un progreso enorme,

incluso en el ámbito empresarial.

La sociedad cambia mucho
más rápido de lo que la gente cree.

Si nos remontamos a los años 50,

al tipo de empresas que teníamos

y a la forma

en que externalizaban
sus desventajas,

ya fuera vertiendo
productos químicos en el río

o maltratando a su personal
de formas horribles,

creo que es inconcebible
que tengamos empresas

que fomenten el tabaquismo

como lo hacían en aquella época,

o que fomenten la obesidad
y los alimentos grasos.

Creo que de verdad
estamos avanzando,

pero el problema no está resuelto.

Básicamente,

las empresas están
en una lucha constante

por ser más responsables

y más consideradas y respetuosas
con sus empleados.

Lo único que puedo decir
es que, por mi parte, en Inflection

hemos intentado
estructurar la empresa

de manera que pensemos
de forma proactiva

en esas consecuencias,

y de hecho estamos
legalmente constituidos

como una empresa
de beneficio público.

- De acuerdo.

Pero ahora, adelantémonos
unos cinco años en el futuro,

no diez ni veinte, solo cinco,

en los que ya empezamos a ver

una IA capaz de realizar
muchos de los trabajos

que hoy en día
realizan las personas

y que los jóvenes
piensan tener en el futuro.

¿Cómo debería adaptarse alguien

que se plantea
su carrera profesional

a un futuro de IA tan explosivo,

tan transformador

y tan cercano,

con tanta incertidumbre
sobre cómo será la sociedad,

más que nunca
en la historia de la humanidad?

¿Cómo cambian los jóvenes
su forma de pensar

a la hora
de prepararse para el futuro?

- Bueno, lo bueno es que,
más que nunca,

estas tecnologías son accesibles
y programables

por personas que no tienen
conocimientos técnicos.

Así que no hace falta
ser ingeniero profesional

para poder experimentar
con un modelo de IA.

Puedes darle instrucciones
en tu propio idioma

con tus propias ideas.

Eso significa que puedes aportar
toda tu creatividad

y toda tu inventiva

a un modelo de IA estándar
con mucha, mucha facilidad.

Lo primero que diría
es que no tengas miedo

porque se diga que hay que superar
una barrera técnica,

porque eso ya no es cierto.

En segundo lugar,

es evidente que las personas
que no provienen

del campo de la ingeniería
de software y los campos técnicos

se benefician mucho
de experimentar con estas cosas.

Por lo tanto, necesitamos
voces más diversas,

personas
con diferentes experiencias

que se interesen por estas cosas

y las utilicen
para crear cosas nuevas,

porque en este momento se necesitan
todas las perspectivas.

Se trata de una transición enorme,

similar a la llegada de Internet

o la llegada de la luz.

¿Te imaginas lo que fue

para las personas que vieron
por primera vez

una bombilla encendida

y descubrieron
el poder de la electricidad?

Eso desencadenó una revolución
en la invención de cosas,

en la microelectrónica

y en innumerables formas
de hacer nuestra vida más cómoda.

Piénsalo como un momento creativo
y emocionante

para inventar y utilizar
estas herramientas

para, básicamente,
hacer realidad nuestros sueños.

Es un gran momento.

- Bueno, déjame preguntarte algo:

todas estas transformaciones
también causan alteraciones.

Algunas de esas alteraciones
son grandes oportunidades.

Otras son más difíciles
si no estás preparado.

Dinos un par de trabajos

a los que crees que la gente
no debería querer dedicarse

en los próximos cinco o diez años,

porque desaparecerán con la IA

y por qué.

- Bueno,
cualquier novedad tecnológica

afecta a ciertos trabajos, ¿no?

Por lo tanto, está bastante claro

que los operadores
de centros de llamadas,

por ejemplo,

que gestionan las solicitudes
de atención al cliente

o incluso los que se dedican
a las ventas, por ejemplo,

habrá inteligencias artificiales

que intentarán hacer eso
de manera más eficiente,

y ya vemos ese tipo de cosas,

así que me preocuparía
por ese tipo de trabajos.

Creo que las habilidades
más valiosas

serán aquellas que abarquen
tanto las habilidades creativas,

de resolución de problemas
y las técnicas.

Por lo tanto, la amplitud
es más importante que nunca.

Una de las cosas que la IA
no hace tan bien

es integrar una amplia gama
de habilidades diferentes

en una sola fuente.

Por lo tanto, yo diría
que hay que ser audaz

y realizar cursos educativos
multidisciplinarios

que enseñen lo mejor
de ambos mundos.

- Mustafa, esta es una tecnología

que mejorará
las capacidades humanas

de cualquiera que las tenga.

Conducirá a inventos más rápidos,

a una reducción de los residuos

y a una mayor eficiencia
en todos los campos.

Como dices, es más que una simple
tecnología transformadora.

También cambia
nuestra forma de pensar

sobre el mundo
y la sociedad en su conjunto.

Me pregunto,

para los jóvenes de hoy en día,

que podrían pensar en vivir 50,
60 o 70 años más en el planeta,

¿cómo ves su futuro?

¿Se los podrá reconocer
como seres humanos

cuando sean adultos?

¿Crees que tendrán
una esperanza de vida ilimitada?

Cuando pienso en la aplicación
de la inteligencia artificial

a la medicina, la biotecnología
y la genética,

me parece realmente asombroso

lo mucho
que podría cambiar el mundo

con respecto a lo que podemos
imaginar hoy en día.

- Estoy de acuerdo.

La tecnología

y el proceso científico
de la invención

sirven para reducir
nuestro sufrimiento.

Sirven para hacer nuestras vidas
más tranquilas y agradables.

Hace solo unos cientos de años,

la esperanza de vida media
era de unos 50 años.

La ciencia ha mejorado muchísimo
nuestro bienestar y nuestra salud

porque hemos inventado medicamentos

y hemos encontrado formas
de obtener más cosechas,

por ejemplo,

con la misma superficie cultivable.

Creo que es un logro increíble
de creatividad e invención.

Y estamos a punto de tomar
ese motor de creatividad,

que era
nuestra inteligencia humana,

y convertirlo en una mercancía.

Lo pondremos al alcance

de millones de personas

para que puedan ser
creativas e inventivas.

Así que creo que tienes
toda la razón.

Para 2050, no me sorprendería

que nacieran personas

que pudieran vivir
entre 200 y 300 años,

ya que vamos a lograr avances
muy importantes

en la ciencia médica

que abordarán el envejecimiento
y curarán enfermedades.

Y eso nos lleva a preguntarnos

qué hacemos con nuestras vidas,

cómo vivimos.

Si una gran parte de la población

no trabaja para obtener ingresos
durante la mayor parte del día,

¿cómo encontramos un sentido
y un propósito?

La gente me hace esta pregunta
a menudo

y yo pienso:

"Bueno, ¿recuerdas
cuando eras joven

y tenías aficiones, pasiones,
ambiciones y deseos,

y te obsesionaban ciertas cosas?

Esa creatividad
y ese espíritu lúdico

estarán cada vez más
al alcance de los adultos

y de las personas
de todas las edades".

Porque creo que, a largo plazo,

el verdadero reto para nosotros

es averiguar cómo apoyamos
a las personas cuando no trabajan

y tal vez darles
un ingreso básico universal,

de modo que, al menos
durante una parte de la semana,

se liberen
de la rutina diaria del trabajo

para cuidar de sus familias,
atender a los ancianos,

involucrarse más
en la crianza de los hijos,

apoyar el servicio comunitario

y ser creativos.

Creo que es importante
recordar esto.

No creamos la sociedad

para inventar puestos
de trabajo de forma artificial

y trabajar por trabajar.

Trabajamos
para poder disfrutar, ¿no?

Por lo tanto,
el objetivo es reducir

la cantidad de trabajo
que nos vemos obligados a hacer

y aumentar el tiempo
que tenemos para disfrutar

y para el trabajo que elegimos.

Puede que decidas
seguir trabajando mucho,

podría ser una opción.

Podría ser muy productivo.

Podría ser
muy creativo e inventivo.

Pero creo que es mucho mejor

la sociedad
en la que queremos vivir,

donde la mayoría de la gente,
la mayor parte del tiempo,

elige cómo pasar
la mayor parte de su semana.

- Sí. Y parece que la pandemia

nos ha ayudado en cierto modo
a pensar en esa transición,

¿verdad?

Ya hay personas que dicen:
"¿Sabes qué?

No quiero estar en la oficina
desde las nueve hasta las cinco

todos los días

con una hora de ida
y otra de vuelta.

En realidad, quiero pasar
más tiempo con mi familia,

pasar más tiempo con mis amigos,
con mis mascotas,

participar más,

vivir en un lugar
en el que sea feliz".

Resulta que la pandemia

y la tecnología que surgió
de la participación a distancia,

las llamadas de Zoom
y todo lo demás,

la tecnología facilitó
una mayor independencia de elección

para que personas de todo el mundo
vivieran como querían

y equilibraran sus vidas

con lo que hacen para ganárselas.

Y la inteligencia artificial
simplemente lo potencia.

¿Es así como lo ves?

- Sí. Creo que durante la pandemia

aprendimos mucho sobre
cómo establecer prioridades

y, de hecho, ese es un punto
muy interesante,

porque nos muestra

la cantidad
de supuestos incuestionables

que subyacen
en la estructura de la sociedad.

¿Quién hubiera pensado

que podríamos trabajar
completamente a distancia

y ser bastante productivos?

No es que no haya
tenido consecuencias,

pero el mundo siguió adelante

y ahora trabajar a tiempo parcial

y no estar cinco días en la oficina

tiene grandes ventajas.

Enormes ventajas.

Creo que--

¿Quién hubiera pensado
que eso era algo

que podíamos rediseñar
desde el punto de vista social?

Por eso me interesa mucho
esta cuestión.

¿Qué otras cosas damos
por sentadas hoy en día?

¿Qué reglas absurdas hay?

¿Cuáles son los hábitos sociales,

las costumbres, las prácticas
y las estructuras absurdas

que existen simplemente por existir

y que podríamos rediseñar,
cambiar por completo

y hacer más favorables

para cada uno de nosotros
como individuos?

- Y resultó que pudimos
rediseñarlas de inmediato

porque tuvimos que hacerlo,

porque la pandemia nos obligó.

No llevó años. Tardó semanas.

Tardó semanas, y la gente demostró

que podía trabajar
de forma completamente diferente.

Se me ocurren algunas cosas
que podrían rediseñarse

en una sociedad que no tuviera
que trabajar para obtener riqueza.

Los prejuicios de género, ¿verdad?

El racismo. El nacionalismo.

Un mundo en el que las personas

puedan vivir tal y como quieren,

y no solo unas pocas,

sino cualquiera que tenga acceso
a estas tecnologías,

será un mundo
en el que las personas elijan

no verse discriminadas
en mayor medida,

porque no tendrán que participar
en esos juegos de poder

que la sociedad les impone

porque así se ha hecho

durante generaciones
y generaciones.

- Sí. Y estoy de acuerdo.

Creo que otra de las cosas
que se avecinan

y que van a cambiar eso

es la capacidad de generar energía,
electricidad,

de forma descentralizada.

Si en los próximos 20 años

se produce un avance significativo

en el campo de las baterías,

de modo
que las energías renovables,

principalmente la solar,
pero también la eólica,

puedan generarse muy lejos
de las ciudades

y almacenarse,
y puedan abastecernos,

eso cambiará por completo
la forma de operar en las ciudades

y modificará

la importancia que le damos
a vivir cerca unos de otros

o en las ciudades
o zonas urbanas existentes.

Así que hay muchos
avances tecnológicos

que, en mi opinión,
se están gestando en segundo plano

y que cambiarán por completo
la estructura social

a la que estamos
tan acostumbrados actualmente.

- Mustafa Suleyman,
muchas gracias por acompañarnos.

- [Narrador] Y para nuestros
espectadores,

si les intrigan
las posibilidades de la IA

y quieren profundizar
en este fascinante mundo,

los invitamos a ver
nuestros otros videos

de esta serie.

Gracias por vernos.

♪ [música] ♪