-
Bienvenido a la parte 3
del estudio Más amplio y profundo.
-
Esta semana veremos cómo desarrollar
un plan de generosidad.
-
Al final del estudio anterior,
-
le pedimos a quienes dan
según un porcentaje
-
que compartieran cómo decidieron
ser generosos de esa manera.
-
Espero no fuera demasiado incómodo.
-
Lo digo porque hablar de dinero
puede ser bastante incómodo.
-
Si tú administras bien tu dinero
-
y te piden hablar de eso,
puedes sentir que presumes.
-
Pero no es así, estás inspirando a otros.
-
Como dije, en esta sesión hablarás
sobre cómo se vería
-
el desarrollar y comprometerse
con un plan de generosidad.
-
Un plan de generosidad rompe el hábito
-
de que mi vida es prioridad
y lo que me sobre será para ofrendar.
-
Mateo, quien escribió un evangelio,
fue recaudador de impuestos,
-
y él conocía lo de ponerse a él primero.
-
Pero se encontró con Jesús,
y todo cambió.
-
Él reordenó su mundo
y lo hizo
-
gracias a una enseñanza
que escuchó de Jesús.
-
De hecho, creo que escuchó
esta enseñanza más de una vez,
-
y creo que también la has escuchado
en varias ocasiones.
-
Jesús dijo esto:
"busquen primeramente el reino de Dios
-
y su justicia, y todas estas cosas
les serán añadidas".
-
"Busquen primeramente",
es decir, que haya prioridades.
-
Eso requiere planeación, ¿verdad?
-
Esto requiere disciplina
y ser intencional,
-
lo cual, de nuevo, requiere un plan.
-
La mayoría de gente no tiene
un plan de generosidad,
-
Quizá tienen un plan para gastar,
el cual llamamos...
-
...presupuesto, así es.
-
Los más responsables tienen
un plan de ahorro.
-
Pero un plan para dar,
es muy raro.
-
Y lo es porque,
¿quién querría hacer eso?
-
Las personas no tienen un plan para dar,
-
no porque no quieran dar,
sino porque dan cuando se les pide.
-
Visto así, supongo
que sí tienen un plan para dar:
-
planean dar cuando se les pida
y cuando tengan para hacerlo.
-
Esa es la esencia de mi vida
como prioridad y el resto para ofrendar.
-
Pero un plan de generosidad real,
en lugar de uno accidental,
-
nos lleva a vivir buscando primero
el reino de Dios,
-
porque damos prioridad
a nuestras ofrendas.
-
Es por eso que constantemente te animo
-
a primero dar, segundo ahorrar
y luego, vivir con el resto.
-
Dar, ahorrar, vivir.
-
Ahora, imagino que alguien en tu grupo
tiene un plan de generosidad,
-
y ya que la generosidad se contagia,
-
si ese eres tú,
te animo a compartir tu plan.
-
Quiero que compartas el contexto,
-
qué o quién te inspiró
para tener un plan de generosidad
-
y priorizar la generosidad.
-
¿Cuándo desarrollaste tu plan?
¿Cómo ha cambiado con el tiempo?
-
Comparte tu historia,
incluyendo lo malo y lo bueno.
-
Si no tienes un plan de generosidad,
-
espero que seas motivado a crear uno.
-
No te arrepentirás.
-
Además, piensa en esto,
dentro de poco tiempo,
-
tendrás una historia inspiradora
para compartir.
-
Tu generosidad inspirará a alguien más
para ser más generoso,
-
y cuando cuenten su historia,
-
la conectarán contigo.
-
Ahora, le dejo el lugar
a tu valiente facilitador.
-
Que tengan una buena plática.